¿Cuántas veces has oído la palabra “ansiedad”? ¿y la palabra “pandemia”? . Por desgracia son dos términos muy conocidos, así como sus consecuencias. Hoy te quiero contar un poco más sobre ambas y qué está en tu mano para asumirlas de la forma más saludable posible.
¿Qué es la ansiedad?
Existen muchas definiciones que si tienes curiosidad puedes buscar en múltiples páginas científicas.
Lo que yo quiero mostrarte sobre ella, es que cada persona la vive de una manera. Por ello, en vez de centrarnos en etiquetar, prefiero que sepas que cuando sientas diferentes síntomas ansiosos (insisto, cada persona tiene unos específicos), es una señal de aviso. Si, de aviso, es una alarma a través de la cual tu cuerpo te avisa de que algo no va bien. Por eso, me gustaría que en vez de ver a la ansiedad como una enemiga, comiences a percibir que a través de ella, puedes detectar que algo no va como tú quieres y que es el momento de actuar.
Es una señal de alerta que advierte sobre un posible peligro futuro y permite que la persona adopte las medidas necesarias para enfrentarse a la amenaza o posible amenaza.
Es una alarma natural, que vela por tu bienestar, ¡qué suerte!.
¿Qué diferencia hay entre el miedo y la ansiedad?
Tal y como destaca el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5): “El miedo es una respuesta emocional a una amenaza inminente, real o imaginara, mientras que la ansiedad es una respuesta anticipatoria a una amenaza futura”.
Evidentemente en ciertas situaciones se pueden solapar, pero esa es la diferencia crucial. Cuando una persona tiene sintomatología ansiosa, se siente amenazado/a o preocupado/a ante amenazas futuras y, en muchos casos, sin la certeza de que se puedan producir.
¿Cómo ha afectado la pandemia al número de personas con sintomatología ansiosa?
Después de lo que has leído, no te sorprenderá saber que desde que comenzó la pandemia ha subido de manera exponencial el número de personas con esta sintomatología. La incertidumbre, los cambios constantes, la imposibilidad de hacer planes a medio-largo plazo, entre otros, son claros factores de riesgo para padecer o fomentar la ansiedad.
Existen muchas iniciativas creadas como consecuencia de ello, en Illinois, se ha creado una línea gratuita para apoyo emocional llamada “Call4Calm”. Es una iniciativa creada por Illinois Department of Human Services’ Mental Health Division, que busca atender a las personas que tienen problemas de estrés y emocionales como consecuencia del COVID-19. Les permite hablar con un/a profesional de la salud mental, de manera gratuita y personalizada.
¿Para qué te cuento esta iniciativa?
Porque considero que es justo lo que necesita una persona con sintomatología ansiosa (y problemas de salud mental). Buscar ayuda profesional. La sintomatología ansiosa puede ser muy limitante, y nos merecemos vivir una vida de calidad. La sintomatología ansiosa no se “soluciona”, se atiende.