¿Qué es? ¿Cómo hacerle rente? Hoy te lo cuento.
Definición
Se considera dolor emocional, como es probable que sepas, al sufrimiento generado a nivel psíquico, siendo las causas de dicho dolor únicamente mentales y se deben normalmente a una experiencia vital aversiva (ya sea esperada o no).
Permitámonos estar mal.
Estamos acostumbrados a huir del dolor, nuestra sociedad no le presta la importancia ni el tiempo suficiente a este sufrimiento tan intenso. Es normal que cuando sientes dolor quieras dejar de sentirlo, pero es importante que te des el tiempo justo para vivirlo, sentirlo y compartirlo; insisto el tiempo justo, ni más ni menos.
Una vez ha dado comienzo el dolor es importante que hagas estos tres pasos:
- – Acepta la realidad de lo que ha sucedido. Permítete sentir incredulidad, es normal, y poco a poco avanza hacia reconocer lo que ha pasado. Por ejemplo, en caso de que haya sido una pérdida, reconoce (sin prisa) esa pérdida.
- – Reconocimiento de emociones y sentimientos. Soy siempre muy pesada con esta parte, pero créeme que es realmente importante. No evites tus sentimientos, no guardes tus emociones debajo de la alfombra, es necesario que te abras al dolor y a la pena sin juzgarte. Si evitamos constantemente nuestras emociones, no hacemos más que ponernos límites a nosotrxs mismxs. ¿Quieres ser una persona limitada? ¿Quieres vivir rodeadx de límites puestos única y exclusivamente por ti?
Sé que puede ser muy dolorosa esta parte, pero es necesario dejarnos sentir lo que estamos viviendo y solo así podrás avanzar de una manera saludable; insisto de manera equilibrada, en su justa medida, ni más ni menos.
- – Adaptarse al medio con tu dolor y con lo que haya cambiado tras lo que has vivido. Adaptarse al medio, por ejemplo, en caso de fallecimiento, sin la persona fallecida, resulta un reto muy duro, doloroso e intenso para quien debe hacerlo. Por ello, es normal que durante este proceso sea necesario que revises el mundo de significados que habías creado hasta ahora, las creencias que tenías y valores.
Con estos tres pasos, puedes dar comienzo a la gestión del dolor emocional de una manera saludable; aunque cada persona puede necesitar un proceso específico, por lo que si lo consideras necesario recurre a un/a profesional.
Ejercicio que fomentará tu bienestar personal.
Un ejercicio que te puede venir muy bien si estás sintiendo un dolor intenso (y que está científicamente demostrada su eficacia) es escribir sobre cómo estás, qué sientes, qué te preocupa… en definitiva, que escribas sobre todo lo que se te pasa por la cabeza.
Escribir de una manera honesta, explorando cómo estas de verdad y abiertx a escribir sobre todo lo que te apetezca te permite que aquello que estás repitiendo una y otra vez en la cabeza se organice, te de nuevas perspectivas y reduce el nivel de activación.
Es una forma de parar esos pensamientos constantes, pensamientos rumiativos, llevándote así lejos de ellos y por tanto en sentido contrario a la ansiedad y depresión.
Dibujar sobre lo que sientes también es una forma de conseguir el mismo fin, autocuidarte.
En caso de que tengas dudas o quieras saber más técnicas para afrontar el dolor no dudes en preguntarme.